domingo, 28 de mayo de 2017

galletas de limón para un desayuno dominguero




Vitaly Urzhumov


De aquellos azahares
desatados
por la luz de la luna,
de aquel
olor de amor
exasperado,
hundido en la fragancia
salió
del limonero el amarillo,
desde su planetario
bajaron a la tierra los limones.
                                                                               Pablo Neruda

Aunque falta casi un mes para que entre oficialmente el verano se puede decir que tenemos unos días completamente estivos y también cargados de humedad,  a veces parece como si fuera a estallar una tormenta en cualquier momento... Esta mañana temprano mientras ponía alimentos a refrescar en la nevera me llegaba del jardín el perfume intenso del jazminero en flor que lo envuelve todo, el olor de la hierbabuena, y también de la fresca hierbaluisa recién plantada ...  

... y como un rayo de luz  las Odas de Neruda vuelan del papel a mi mente...


limones, peladillos y berenjenas
compiten en color
Adoro los limones. En mi cocina nunca faltan. Me encanta su color y su jugo que diluyo en agua y bebo cada mañana apenas me levanto. Mirándolos en la cesta como soles matutinos me entraron ganas de preparar una receta conocida que tenía guardada desde hace tiempo y aún no experimentada por mí:  galletas de limón.  Para ser la primera vez  y dado que no soy una experta galletera confieso que han resultado muy fáciles de preparar pero sobre todo espléndidas. Son unas galletitas llenas de fresca fragancia y  friables, ideales para un desayuno dominguero y con delicioso sabor a limón .
Si amas como yo la frescura del gusto del limón  ¿te animas a hacerlas?

                           Galletas de limón



Ingredientes (salen unas 25 unidades)

Azúcar 120 gr.
Aceite de cacahuetes ( o de otra semilla) 70 ml ( si prefieres mantequilla 100 gr.)
Huevo 1
Limón 1 (grande) jugo y piel
Harina para dulces con levadura incorporada 275 gr.( en su defecto incorporar a la harina 1 cucharadita de levadura)
Azúcar  y azúcar glas para cubrir las galletas antes de hornear


bolitas antes de hornear envueltas
en un velo de azùcar
Y ahora manos a la obra. Batimos en un cuenco el azúcar con el aceite formando una crema, yo uso el de cacahuetes que no da sabor y va muy bien (pero se puede usar otro aceite o, si prefieres, mantequilla). Luego agregamos el huevo mezclando bien todo. Por fin añadimos la ralladura de la piel y el jugo del limón entero. Para terminar echamos la harina poco a poco con la levadura y mezclamos el conjunto con la mano para amalgamarlo bien. Nos queda una masa blanda y pegajosa. La dejamos reposar una hora en el frigorífico. Pasado este tiempo notamos que el amasijo ha endurecido por lo que vamos cogiendo un poco de masa con una cuchara y formamos con las manos enharinadas unas bolas del tamaño de una nuez. Las pasamos primero por azúcar que tenemos en un platillo y luego por azúcar glas en otro platillo. Las vamos colocando  sobre la placa de horno cubierta con papel sulfurado en hileras separadas.
galletas recién horneadas
Las cocemos en horno caliente a 180 °C a media altura solo 10 o 12 minutos aproximadamente.
Se nota que están listas porque aumentan de volumen y la superficie se quiebra pero no oscurece apenas. Se pueden preparar la tarde anterior ya que hechas así conservan su característica friabilidad, su corazón tierno :-)


Dejamos enfriar y servimos un agradable desayuno en la terraza, jardín o simplemente en la cocina junto a zumo, té, leche o cappuccino...yo las prefiero con un fresco té a la hierbabuena!
mi pequeño jardín silvestre... necesita un poco de orden
ñam ñam
Unos dulcecitos no dan la felicidad pero al menos  huelen a ella... como el mes de junio que se acerca ...