...En la alcoba la lámpara
derramando las luces
opalinas;
oyéndose tan sólo
suspiros, ecos, risas;
el ruido de los besos;
la música triunfante de mis
rimas
y en la negra y cercana
chimenea
el tuero brillador que
estalla chispas.
Dentro, el amor abrasa;
fuera, la noche fría!
Rubén Darío
Invernal
Azul...
Psique era de una
belleza tan insólita que parecía una diosa. Celosa de ella la diosa Afrodita pidió
ayuda a su hijo predilecto Eros para que hiciera que se enamorara del hombre más
feo y desafortunado de la tierra de modo que quedara humillada. Sin embargo,
Eros no lo hizo... se prendó de ella no solo al verla, sino cuando Psique le dio a
probar uno de los bocaditos de cielo que estaba preparando cuando él se acercó a
su casa...
![]() |
Daniela Dente - Eros y Psique
|
Se trataba de
unos dulces bizcochuelos de tierno corazón de cacao.
Después de degustarlos fueron a
retozar sobre la verde hierba del jardín fresca de orvallos recientes y terminaron dormidos abrazados hasta el
amanecer...
Con los primeros destellos de la aurora, ella se convirtió en mariposa y alzó el vuelo alegre de flor en flor, y el dios del Amor se fue a trabajar recordando su sueño.
Con los primeros destellos de la aurora, ella se convirtió en mariposa y alzó el vuelo alegre de flor en flor, y el dios del Amor se fue a trabajar recordando su sueño.
Pedazos de cielo chocolatosos
Ingredientes:
Chocolate negro:
100gr.
Mantequilla: 100
gr.
Agua: 2
cucharadas
Huevos: 2 enteros
Azúcar: 80 gr.
Harina para
dulces o leudante: 40 gr.
Ralladura de
naranja (opcional)
Preparación:
Engrasamos y
enharinamos ligeramente seis moldes horneables pequeños.
Derretimos en un
cazo al calor de la lumbre el chocolate y mantequilla junto a dos cucharadas de
agua .
![]() |
Derritiéndose |
Luego, fuera del fuego, añadimos a la crema derretida los huevos, el azúcar y
la harina tamizada o dejada caer a lluvia. Mezclamos muy bien para obtener una
crema homogénea.
Vertemos la crema
en los moldes hasta la mitad (unas cuatro o cinco cucharadas en cada uno) y los
horneamos a 220° durante unos diez minutos o hasta que se ve que forman una
costra que comienza a resquebrajarse. Es entonces que deben sacarse del horno rápidamente
para conseguir que el corazón del bizcochuelo se mantenga tierno y
jugoso, y ponemos a enfriar los bizcochuelos...
y ahora ya podemos hincarles el diente...mmmm... de muerte, están de muerte, basta comer un pedacito de
cielo, sin exagerar, porque son un vicio absoluto... Son ... peccati di gola. Estupendos quedan también estos bizcochuelos si los acompañamos con una bola de helado de vainilla o
crema.
Este dulce se lo dedico a mi Luc :-) y a todos los amantes del chocolate intenso y del Amor.
La noche se ha puesto su brillante mantilla de lunares y ya los últimos rescoldos de mi lareira se disipan, fuera se escuchan las ninfas del agua danzar...
Felices días de febrero
P.S: Como soy una romanticona os dejo con una de mis canciones de amor preferidas, espero que os guste